Pregunta común de los papás en nuestra clínica de odontopediatría en Brunete.
Estamos acostumbrados a que al dentista sólo se va cuando tenemos algún problema bucal o dental, pero que tu hijo venga a nuestra clínica de odontopediatría en Brunete es muy importante. Obviamente esto tiene como resultado que muchos niños y niñas le tengan miedo a ir a la consulta del dentista, si ven siempre a los adultos hablando no demasiado bien del dentista.
Pero, si no se va al dentista por un problema en específico, ¿para qué desplazarnos hasta una clínica dental? Bien pues, un odontólogo, sobre todo uno con formación en odontopediatría como los que se encuentran en nuestra clínica cerca de Brunete, puede aportar mucho más a la salud bucal de los más pequeños de la casa. El odontopediatra se hace cargo desde que nace hasta alrededor de los catorce años, que es cuando ya hemos cambiado de manera total o casi total las piezas dentales de leche por las finales.
Es recomendable que la primera visita al odontopediatra sea alrededor del primer año de vida y después realizar visitas periódicas. De esta manera podrá observar el estado de las encías durante el desarrollo de la primera dentadura e indicar a los padres diferentes maneras de mejorar la salud dental o de evitar futuros problemas. Por ejemplo, si hábitos como dormir con el chupete en determinada posición, coger costumbre de chuparse los dedos o consumir determinadas comidas, entre otros, están afectando de manera negativa en el desarrollo de las piezas dentales.
Gracias a estas visitas periódicas el niño crecerá acostumbrado al dentista y no le tendrá tanto miedo o respeto como otros niños, lo que puede ayudar a posteriori si hay que realizar alguna consulta por algún problema. Además, el odontopediatra le enseñará hábitos saludables de limpieza bucal, muy importante para evitar problemas como las caries, por ejemplo.
En nuestra clínica dental de odontopediatría cerca de Brunete contamos con expertos en odontopediatría que se harán cargo de que tu hijo o hija crezca evitando lo máximo posible los futuros problemas bucales que suele tener la población en general.